¿Sabías que...
El desenlace de la guerra de Atenas contra Esparta
La fiebre tifoidea acabó con el esplendor de Atenas en 431 a.C.
Atenas, Roma, Egipto... las antiguas civilizaciones que tenian más poder antiguamente siempre acabaron sufriendo algún tipo de conflicto que mermó su expansion o que las debilitó tanto como para hacerlas desaparecer. La caida de Atenas empieza en primavera de 431 a.C.
En aquella época Atenas luchaban contra Esparta, pero no contaban con el mal que hizo que se debilitasen notablemente: la peste. Aunque recientemente se ha descubierto que en realidad era una fiebre tifoidea.
Esta conclusión ha sido posible grácias al estudio de ADN de huesos encontrados en una fosa común de ese mismo periodo, en la localidad de Kerameikos, muy cerca de Atenas. Tucídies, historiador griego de la época que también acabaria cayendo por popularmente conocida en esa época como "peste", intentó estudiar sus efectos y los relató en "Historia de la guerra del Peloponeso".
"Jamás se vio en parte alguna azote semejante y víctimas tan numerosas; los médicos nada podian hacer, pues desconocían la naturaleza de la enfermedad [...]. En general, el enfermo sentía en primer lugar un violento dolor de cabeza; los ojos se volvían rojos e inflamados; la lengua y la faringe asumían un aspecto sanguinolento; la respiracion se tornaba irregular y el aliento fétido. Poco después el dolor se localizaba en el pecho, acompañándose de tos violenta; cuando atacaba al estómago provocaba náuseas y vómitos, con regurgitación de bilis"
Tal debastadora epidémia acabó con un tercio de los habitantes de Atenas en su siglo de oro, marcando decisivamente la suerte contra Esparta, dado que el hecho de mantenerse encerrados dentro de la ciudad hizo que los efectos se multiplicasen.
Redactado por David Auger Iniesta
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